No está bueno que a la gente se le caiga la careta.
No está bueno que después de un par de años, te des cuenta que en realidad esas personas esconden tras de su máscara de simpatía una personalidad aborrecible al ojo personal.
Efectivamente; las hormonas y la adolescencia son una auténtica mierda.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¡SHH!